
.
La polémica, evidentemente, estaba servida, pero teniendo en cuenta el contenido de “Caín”, las declaraciones del autor eran accesorias: su libro absuelve al hermano malo del fraticidio culpando a Dios del mismo por ser su instigador y autor intelectual. Aún así el novelista luso, eternamente enemistado con la Iglesia y militante del Partido Comunista Portugués desde 1969, no se quedó corto al denunciar a “un Dios cruel, envidioso e insoportable” que “solamente existe en nuestras mentes”. Su obra, agregó, no causará problemas con la Iglesia “porque los católicos no leen la Biblia”.
“La Biblia es un manual de malas costumbres, un catálogo de crueldad, y de lo peor de la naturaleza humana”, “un libro que tuvo mucha influencia en nuestra cultura y hasta en nuestro manera de ser” sin el que los humanos seríamos “probablemente mejores”.

“La Biblia es un manual de malas costumbres, un catálogo de crueldad, y de lo peor de la naturaleza humana”, “un libro que tuvo mucha influencia en nuestra cultura y hasta en nuestro manera de ser” sin el que los humanos seríamos “probablemente mejores”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario